Hilo blanco y una aguja de ganchillo han sido los únicos elementos para hacer esta puntilla, pero lo que más he necesitado han sido kilos y kilos de paciencia.
He pasado muchas horas dando le a la aguja, y he tenido momentos de desfallecimiento, pero en esos momentos me bastaba pensar en los ratos que pasare sentada a la mesa en compañía de familiares y amigos, cuando estuviera terminada y esta idea me animó a continuar.
Ahora falta la tela, pero aún no tengo muy claro que poner, bueno ya lo pensare y la decisión final tendrá mucho que ver con las ganas que tenga de coser.
Espero que os guste.